En la actualidad los gérmenes o bacterias son cada vez un problema que afecta a la sociedad, por esta razón los métodos de limpieza han tenido que evolucionar para alcanzar una mayor efectividad y elevar el nivel de eliminación de los mismos.
Como parte de esta evolución o adaptación de los métodos de limpieza, se percibe en el mercado un auge en la compra de las máquinas de pulverización electrostática, las cuales se han vuelto una herramienta indispensable cuando de desinfección se trata.
Un ejemplo de estas adaptaciones es el uso cada vez mas frecuente de pulverizadores en la desinfección de personas, es decir, los equipos se se han modificado para poder emplearse en personas antes o después de estar en un determinado lugar.
Usos variables de las máquinas de pulverización
Cuando los equipos de pulverización se emplean para la desinfección son tan indispensables como la solución con la que se cargan sus tanques, dado que los mismos garantizan el desprendimiento de los gérmenes.
Esta efectividad está sujeta en esencia a dos variables fundamentales, la velocidad del socio y la disgregación de las gotas del fluido; la primera de ellas garantiza que al impactar contra la superficie la solución logre desprender las bacterias sobre la misma.
Mientras que la segunda variable garantiza un mayor espectro de cobertura en la superficie, sin embargo, también es importante garantizar que sobre el área a desinfectar quede una película delgada de la solución para mayor protección contra las bacterias.
Dependiendo de la superficie que se quiera limpiar también se aplica el factor de tamaño de la gota, por ejemplo: no será aplicado el mismo tamaño de la gota para desinfectar el suelo o las paredes en el exterior, al requerido para desinfectar a una persona cuando desea ingresar a algún espacio.
Cuando lo que se requiere es desinfectar a una persona para dirigirse por ejemplo a su área laboral, o cuando se dirige a un local determinado, las máquinas de pulverización electrostática son diseñadas en forma de túnel, es decir, en su estructura son similares al marco de una puerta.
Estos nuevos túneles disponen de tuberías por todo el parámetro, lo que garantiza desinfección en 180° en el eje vertical, al mismo tiempo que permite la limpieza incluso en la planta del calzado.
A diferencia de las máquinas de pulverización electrostática tradicionales en estos equipos el operador sólo debe activar el mecanismo, mientras que el usuario (quien utiliza el equipo) debe realizar determinados movimientos dentro del mismo para garantizar la desinfección a 360° en el eje horizontal.
